[spa] Es una técnica de gran utilidad por su bajo costo, variadas indicaciones, fácil manipulación y rapidez, que permite obtener una muestra de piel suficiente para el diagnóstico anatomopatológico de la mayoría de las lesiones cutáneas. Según el punch que se utilice, se obtiene un fragmento de 2-8 mm de longitud y de 7-9 mm de profundidad, con unos resultados estéticos muy buenos y una cicatriz frecuentemente inaparente. El punch es un bisturí de hoja cilíndrica. Los punch clásicos son de acero, reesterilizables y muy económicos, aunque con el paso del tiempo pierden su borde cortante y precisan de un afilado periódico. En la actualidad existen punch-biopsia desechables, que se componen de un mango de material plástico y de una cuchilla cilíndrica fabricada en diámetros que oscilan de 2-8 mm.