El principal objetivo del presente estudio es el análisis de los efectos que provoca la presencia de salarios mínimos en la economía. Al no existir un consenso en la teoría económica sobre esta cuestión, la evidencia empírica se perfila como el medio más fiable de dar respuesta a las preguntas que pudieran formularse con respecto a esta materia.
El uso de herramientas como el Índice de Kaitz nos permitirá conocer cuál es la importancia que adquiere el salario mínimo interprofesional en los distintos puntos del territorio español. Además utilizaremos hipótesis básicas de fijación de salarios para demostrar que la consolidación de un salario mínimo causará desempleo en aquellos puestos de trabajo cuya productividad se encuentre por debajo del mismo.
Los resultados muestran que incrementos de SMI provocan efectos negativos sobre el empleo especialmente en los jóvenes, siendo prácticamente nulos para el resto. Sin embargo, aunque el colectivo potencialmente afectado es pequeño, su impacto sobre la probabilidad de perder empleo para un conjunto más amplio de trabajadores será significativa siempre que esos aumentos de SMI terminen afectando a la distribución salarial total vía negociación colectiva.