[eng] Like Columbus mistook America for India, we stepped into the
era of misinformation mistaking it for the era of big data. Since
the digital revolution in the early ’90s we started producing such
a huge amount of data that we do not even know how to find
our compass anymore. However, not all this data is available
and accessible. In this thesis, by navigating through the seas of
available, open and even purchased data on board of our knowledge
of physics and complex systems, we try to draw some new
routes and shortcuts to study human mobility in different contexts,
scales and applications.
We first introduce a simple method to treat Twitter data on
the Venezuelan exodus to show how this data can consistently
reproduce and uncover many different aspects of migration until
now neglected. This method designs a safe route to solve many
more open questions not yet explored due to the limitations of
classic and other sources of migration data in many parts of the
world.
The same type of data provides us reasonable footprints of
human mobility, which lead us to an innovative shortcut in the
way in which a specific type of urban mobility is treated so far.
By hoisting the sails of theoretical physics, we can add a field
theoretic description of commuting in worldwide cities, which
simplifies the complexity of the description of urban mobility.
By means of this new framework it is possible to tackle the well
known aspect of policentricity of cities, drawing urban basins of
attraction and reproducing them through a field theoretic version
of the gravity model.
Following the same shortcut we get to discover something that
has been only theorized so far in pedestrian dynamics: the navigation
potential of evacuation. This potential has been used by
many social interactions models, which have been used to study
new and better policies to avoid cloggings and stampedes during
evacuation drills, hence creating safer protocols for our buildings
and public spaces.
In the middle of our navigation, we suddenly bump into a new
epidemic and we perform a route change. By purchasing mobile
and smartphones location datasets to find our compass and cope
with noisy epidemic records, we are able to uncover the so called
multi-seeding effect, which has been studied mostly theoretically.
This allows us to backtrace and remap the epidemic spreading in
Western Europe to specific epidemic hubs. By means of metapopulation
models, we confirm our hypotheses on multiseeding using different contact network topologies. Our results allow to
designate efficient policies like selective lockdowns and to better
prepare healthcare systems of areas which are more exposed to
mobility from epidemic and mobility hubs.
While the epidemic spreads in Europe, we spot the first cases
on the American coasts. The same phenomenon we already saw
can be observed at smaller scales in the United States, this time
within cities at neighborhoods level. Here we need a high resolution
Google dataset in order to see that cities mobility hierarchy
leads the disease to spread faster than in sprawled urban
areas. However, hierarchy also helps containment policies to better
suppress the disease, whereas the same restrictions are less
effective in non-hierarchical metropolitan areas. Some cities are
more senstive to disease spreading and they must be accurately
monitored in order to avoid the rest of cities and country to get
involved.
Finally, in order to suppress the disease it is very important
to avoid the virus to board on long-range trips and infect new
places. By means of smartphones location records, we mimic the
spreading of viruses at even finer scales inside the busiest airport
of Europe: Heathrow, London. By modeling the implementation
of a spatial immunization system we are able to strongly reduce
the outbreaks within the airport and the number of exported
infections abroad. The same technique can be applied even in
ordinary public buildings to create safer spaces for the everyday
life in the post-Covid era.
In this thesis our philosophy is to always rely on the empirical
observations to design hypotheses, models and finally solutions.
Thanks to the scientific method, we manage to solve complex
problems in the field of human mobility with simple approaches
and relatively big data. Most of the results presented in this thesis
belong to published and in submission works [1–6].
[spa] Tal como Colón confundió América por India, hemos entrado
en la era de la misinformación confundiendola por la era de big
data. Desde la revolución digital, hemos empezado a producir
una tal cantidad de datos que ya ni siquiera sabemos donde encontrar
nuestra brújula. En esta tesis, navegando por los mares
de los datos disponibles, a bordo de nuestro conocimiento de
física y sistemas complejos, intentamos dibujar nuevas rutas y
atajos para estudiar la movilidad humana en diferentes contextos,
escalas y aplicaciones.
Primero introducimos un método para tratar datos de Twitter
sobre el éxodo venezolano para mostrar como estos datos
pueden reproducir y desvelar muchos aspectos de la migración
hasta ahora no accesibles. Este método diseña una ruta segura
hacia la resolución de muchos temas abiertos que aún no se han
explorado debido a las limitaciones de los datos clásicos.
El mismo tipo de datos nos deja huellas fiables de movilidad
humana, que nos llevan a un atajo novedoso en el tratamiento
de la movilidad casa-trabajo. Izando las velas de la física teórica
podemos añadir una descripción de campo del pendularismo en
ciudades. Con este enfoque podemos atacar el problema de la
policentricidad de las ciudades, dibujando cuencas de atracción
urbanas y reproduciendolas através una versión de campo del
gravity model.
Siguiendo el mismo atajo llegamos a descubrir algo que solo
se había teorizado hasta ahora en dinámicas de peatones: el potencial
de navegación de evacuaciones. Este potencial se ha usado
en muchos modelos de interacciones sociales, que se han usado
para evitar atascos y estampidas durante las evacuaciones,
entonces creando protocolos más seguros para nuestros edificios
y espacios públicos.
En el medio de nuestra navegación nos encontramos en una
nueva epidemia y nos vemos obligados a un cambio de ruta.
Adquiriendo datos de localización por antenas de móviles y por
gps de smartphones para encontrar nuestra brújula, somos capaces
de descubrir el denominado efecto multi-seeding, que se
ha estudiado por la mayoría teoricamente. Gracias a modelos
de metapoblaciones, confirmamos nuestras hipótesis sobre el
multiseeding. Nuestros resultados permiten diseñar políticas eficientes
como confinamientos selectivos y praparar de una manera
mejor los sistemas sanitarios de las áreas más expuestas en
términos de movilidad desde las fuentes epidémicas.
El mismo fenómeno que hemos visto puede observarse a escalas
más pequeñas en Estados Unidos, esta vez dentro de ciudades.
Aquí necesitamos los datos de Google en alta resolución
para ver que las ciudades jerárquicas exhiben difusiones más
rápidas que en las ciudades decentralizadas. En contrapartida, la
jerarquía ayuda las políticas de contención para mejor suprimir
el virus, mientras que las mismas restricciones tienen un menor
efecto en las áreas metropolitanas decentralizadas. Algunas ciudades
son más sensibles que otras a la difusión epidémica requiriendo
una supervisión estricta para evitar que el resto de
ciudades y paises se infecten a su vez.
Finalmente, para suprimir la epidemia es muy importante evitar
que el virus no embarque en viajes de larga distancia e infecte
nuevas regiones. Gracias a datos de localización gps de
smartphones, imitamos la difusión de varios viruses a escalas
aún más pequeñas dentro del aeropuerto de Heathrow, Londres.
Modelizando un sistema de inmunización espacial conseguimos
reducir fuertemente los brotes dentro del aeropuerto
y el número de infecciones exportadas al extranjero. La misma
técnica se puede aplicar en edificios públicos ordinarios para
crear espacios más seguros para la vida de cada día en la era
post-Covid.
Gracias al método científico, conseguimos resolver problemas
complejos en el campo de la movilidad humana con enfoques
simples y datos relativamente grandes.
[cat] Tal com Colom va confondre Amèrica per l’Índia, hem entrat en
l’era de la misinformació confonent-la per l’era del big data. Des
de la revolució digital, hem començat a produir una tal quantitat
de dades que ja ni tan sols sabem on trobar la nostra brúixola.
Navegant pels mars de les dades disponibles, a bord del nostre
coneixement de física i sistemes complexos, vam intentar
dibuixar algunes noves rutes i dreceres per estudiar la mobilitat
humana en diferents contextes, escales i aplicacions.
Primer introduïm un mètode per tractar dades de Twitter sobre
l’èxode veneçolà per mostrar com aquestes dades poden reproduir
i revelar aspectes de la migració fins ara no accessibles.
Aquest mètode dissenya una ruta segura cap a la resolució de
molts més temes oberts que encara no s’han explorat a causa de
les limitacions de les dades clàssics.
El mateix tipus de dades ens dona empremtes de la mobilitat,
que ens porten a una drecera nova en el tractament de la
mobilitat casa-treball. Hissant les veles de la fìsica teòrica podem
introduir una descripció de camp de la mobilitat pendular.
Amb aquest enfoc és possible abordar el problema de la
policentricidad de les ciutats, dibuixant conques d’atracció urbanes
i reproduciendolas través una versió de camp de l’gravity
model. Seguint la mateixa drecera arribem a descobrir una cosa
que fins ara només s’havia teoritzat en dinàmiques de vianants:
el potencial de navegació d’evacuacions. Aquest potencial s’ha
usat en molts models d’interaccions socials per evitar embussos
i estampides durant les evacuacions, a fi de crear protocols més
segurs per als nostres edificis i espais públics.
Al mig de la nostra navegació ens trobem en una nova epidèmia
i ens veiem obligats a un canvi de ruta. Adquirint dades de
localització per antenes de mòbils i per gps de smartphones,
som capaços de descobrir l’anomenat efecte multi-seeding, que
es ha estudiat per la majoria teòricament. Gràcies a models de
metapoblacions, confirmem la nostra hipotesis sobre el multiseeding.
Els nostres resultats permeten dissenyar polítiques eficients
com confinaments selectius i praparar d’una manera millor
els sistemes sanitaris d’aquelles àrees més exposades en termes
de mobilitat des de les fonts epidèmiques.
Mentre l’epidèmia segueix a Europa, vam detectar els primers
casos a les costes Americanes. El mateix fenomen que hem vist
pot observar-se a escales més petites als Estats Units, aquest cop
en ciutats. Aquí necessitem les dades de Google d’alta resolució
per veure que les ciutats jeràrquiques exhibeixen difusions
més ràpides que a les ciutats decentralizades. Per altra banda, la
jerarquia ajuda les polítiques de contenció per millor suprimir
el virus, mentre que les mateixes restriccions tenen un menor
efecte en les àrees metropolitanes decentralizades. Algunes ciutats
són més sensibles que d’altres a la difusió epidèmica requerint
una supervisió estricta per evitar que la resta de ciutats i
països s’infectin al seu torn. Finalment, per suprimir l’epidèmia
és molt important evitar que el virus no sigui embarcat en viatges
de llarga distància i infecti noves regions. Gràcies a dades
de localització GPS de smartphones, imitem la difusió de diversos
virus a escales encara més petites dins de l’aeroport de
Heathrow, Londres. Un sistema d’immunització espacial es capaç
de reduir fortament els brots dins de l’aeroport i la quantitat
de infeccions exportades a l’estranger. La mateixa tècnica es pot
aplicar a edificis públics ordinaris per crear espais més segurs
per al dia a dia en l’era post-Covid.
Gràcies a el mètode científic, vam aconseguir resoldre problemes
complexos en el camp de la mobilitat humana amb enfocaments
simples i dades relativament grans.