[spa] La patología aórtica estenosante de etiología degenerativa es la
principal valvulopatía de nuestro medio, con un incremento
exponencial ante el actual aumento de la esperanza de vida.
Su diagnóstico y evolución mediante procedimientos no invasivos
como la ecocardiografía, postula dicha técnica como de elección por
su rapidez, sencillez, bajo coste y baja morbi-mortalidad.
El método gold estándar para la cuantificación de la severidad de la
estenosis aórtica mediante ecografía transtorácica es el cálculo del
área valvular aórtica mediante la ecuación de continuidad.
Como cualquier parámetro presenta limitaciones principalmente
ligadas a la incorrecta medición del diámetro del TSVI o la
sobreestimación de la severidad en la disfunción sistólica. Por ello, no
debe valorarse como parámetro aislado.
Debe evaluarse de manera conjunta con el gradiente de presión
medio de la válvula aórtica y la relación de velocidades, teniendo en
cuenta también las limitaciones de estos métodos como la incorrecta
alineación Doppler del flujo aórtico, aumento o disminución del gasto
cardíaco, HTA, etc.
De la muestra de pacientes estudiados (n=50) se pudo extraer que el
método con peor concordancia fue el AVA por planimetría (18%)
siendo el mejor el AVA por ecuación de continuidad (76%).
Además, solo se asoció con significancia estadística la estenosis
aórtica severa por EC con HVI (p=0,016) e HAP (p=0,033), no
encontrándose relación con otras variables como la HTA, fracción de
eyección o parámetros de función diastólica, probablemente
secundario al tamaño muestral.