El presente texto tiene por objeto analizar las consecuencias de la globalización y la alianza entre el neoliberalismo y el conservadurismo sobre las mujeres y el feminismo. Se observa como el orden global neoliberal y conservador refuerza las desigualdades de género tanto a través de políticas públicas neoliberales como a través del cambio del imaginario social. La transformación global de la política y lo político requiere una rearticulación en clave global del feminismo. Las estrategias han ido en dos líneas: una de orden político-económico y otra de orden jurídico-normativo. Se analizarán los puntos en común de ambas estrategias y sus principales divergencias. Se defenderá la necesidad de articular un feminismo global y anti-neoliberal.