[esp] Ante una situación de convivencia en el mercado de dos marcas susceptibles de generar un riesgo de confusión en los consumidores, se ha venido planteando siempre el problema de si para ejercitar la acción de violación por parte del primer titular registral, es requisito indispensable la previa declaración de nulidad de la marca registrada con posterioridad. El autor analiza la evolución doctrinal y jurisprudencial de este tema en nuestro país y el importante cambio que ha supuesto al respecto la reciente sentencia del Tribunal Supremo de 19 de octubre de 2014.