La crisis financiera y económica mundial provocó una dramática caída del
comercio a nivel internacional. El proceso de terciarización que han
experimentado España y otras economías desarrolladas durante las últimas
décadas, a raíz de la mencionada crisis que otorgó un mayor peso de la
importancia del sector servicios en los mercados de bienes y servicios de los
distintos países, nos conduce a tener una mayor consideración por el sector
servicios a la hora de analizar el mercado de bienes y servicios y la
competitividad de la economía española en el presente texto.
El entorno globalizador en el cual las economías interactuan, ha provocado
que algunos países cambien sus estructuras productivas para así poder hacer
frente a una mayor competitividad comercial.