[spa] Los conflictos son inherentes al ser humano, ya que son una parte implícita
de las relaciones entre las personas. Surgen en todas las instituciones, y los
centros educativos no son una excepción. Dado que son inevitables, trabajar
en la gestión positiva de los conflictos es clave a la hora de asegurar un buen
clima dentro de la comunidad educativa. Centrándonos en el alumnado, está
demostrado que una buena convivencia dentro del centro es uno de los
aspectos que más afectan a su nivel de motivación, que a su vez influye
profundamente en su proceso de aprendizaje.
En este sentido, las prácticas restaurativas son una potente herramienta
para la resolución de conflictos. Además, sirven para construir y mantener
relaciones personales sanas, así como para educar a los estudiantes en
valores como el respeto, la tolerancia y el compromiso, habilidades
imprescindibles para que alcancen un pleno desarrollo personal, social y
profesional; tanto, que su adquisición se ha incluido en el currículum oficial
dentro del marco de las competencias básicas.
Por todo ello, en el presente Trabajo de Fin de Máster se propone la
implementación de los círculos restaurativos como estrategia de prevención y
resolución de conflictos en las aulas de secundaria, tanto desde la acción
tutorial como en el contexto de las diferentes asignaturas, donde además
pueden utilizarse para alcanzar los objetivos académicos específicos. La
propuesta que se presenta se ha adecuado a las características del centro en
el que he realizado las prácticas del MFP: el IES Joan Maria Thomàs.