Santiago de Compostela, una pequeña ciudad periférica del Noroeste de España, es uno de los principales destinos turísticos del continente europeo. Las estrategias de promoción urbana y de creación de una imagen de capital cultural e histórica han logrado este éxito. Desde el último cuarto del siglo XX, las administraciones y agentes urbanos privados han construido una fuerte imagen pública a través de la idea del Camino de Santiago y de los Años Xacobeos. Cuando hemos finalizado uno de estos eventos, el de 2010, conviene analizar como en la prensa, en Internet, en las campañas promocionales públicas y privadas, en las iniciativas culturales, en las guías turísticas, en la obra de los artistas y en la literatura se refleja esta particular visión de Santiago de Compostela. Una imagen hecha a través de su Patrimonio, de su historia y de su funcionalidad cultural y turística. A cambio, la realidad social y los espacios de vida ciudadanos compostelanos desaparecen de su representación pública.