[spa] El desarrollo del lenguaje y la función ejecutiva (FE) tienen una estrecha
relación, probablemente recíproca (Carlson et al., 2005). En este sentido, los
niños con Trastorno del Desarrollo del Lenguaje (TDL) y con dificultades
lectoras (DL) son más propensos a presentar debilidades en el FE. Varios
trabajos han demostrado que estos niños muestran dificultades en el control
de la interferencia y/o en la memoria de trabajo, con un déficit más
pronunciado en la memoria de trabajo fonológica (Im-Bolter et al., 2006; Ralli
et al., 2021). Pero, existe un relativo consenso en que la memoria de trabajo
está alterada en el TDL, todavía es objeto de debate si otros subcomponentes
de la FE se ven afectado, especialmente aquellos relacionados con el control
de interferencias (Kapa & Erikson, 2019).